Sueños inalcanzables por una mente perturbada
Me gustaría contactar con Marte para preguntarle si por el espacio sideral ha visto mis plegarias hechas letras pasar cerca de allí, deseo tener la inmortalidad del alma para poder sucumbir los cielos, traspasar la atmosfera, sentir la gravedad Cero con todo mi cuerpo, tocar las nubes blancas recién nacidas con mis manos bendecidas por el cielo azul y el mar cristalino. Me gustaría sentir el dolor enmudecidos de los niños desfavorecidos y sentir la inmensa sensación de paz después de superar los ocho mil metros escalados, sentir la sensación de frío intenso en mis huesos y calmar el dolor de la mano esclava de los celos, ser el deseo imparable de un ilusionado, la esperanza de quien desea ser amado, tener la sensación de pánico bajo la profundidad de un mar tenebroso, ser el último suspiro de un larga vida, quiero ser la lujuria, la diversión, el placer de los Dioses, quiero ser el verbo “vivo” en los lugares más extremos de la Tierra, la frontera entre la vida y la muerte, quiero ser